Abrir adentro, blindar afuera: el plan de cuarentena administrada de Kicillof y los intendentes
Los intendentes del interior bonaerense que no registran contagios aseguraron a Axel Kicillof que tienen la capacidad para poner en marcha la cuarentena administrada.
El pelotón intendentes del interior bonaerense que no registran casos de coronavirus (Covid-19) en sus distritos le aseguraron a Axel Kicillof que tienen la capacidad de adecuarse a la “cuarentena administrada” que puso en marcha Alberto Fernández el sábado pasado. Esto es liberar actividades y servicios muy puntuales para comenzar a sacar del parate a la economía.
A grandes trazos, los 40 alcaldes peronistas que ayer clausuraron la ronda de consultas que realizó el Gobernador bonaerense le propusieron un plan concreto para que eleve a la Jefatura de la Nación y algunas garantías de cumplimiento: “Abrir adentro, blindar afuera”. “Tienen consenso en que se pueden reactivar algunas actividades”, explicaron fuentes de Gobernación a Diputados Bonaerenses.
La propuesta es extremar los controles al máximo en las entradas de los distritos y reducir la circulación y hacia adentro liberar algunos sectores aplicando protocolos estrictos, que deberán estar contemplados en la carpeta que Kicillof le presente a Santiago Cafiero. Hay algunos intendentes que con sigilo ya venían transitando ese rumbo. Esos ejemplos muestran aperturas en el comercio, sector profesional y algunas pymes.
En determinados municipios sin casos positivos de Covid-19 atienden psicólogos, kinesiólogos y nutricionistas y funcionan comercios como casas de vestimenta, calzado, aseguradoras e inmobiliarias. La actividad rural está permitida desde el comienzo del aislamiento. En paralelo, hay toques de queda, controles más estrictos y, claro, una baja densidad poblacional.
Por caso, un intendente de la Segunda puso sobre la mesa la intención de permitir la apertura de algunos comercios, como peluquerías, casas de electrodomésticos, lavaderos de autos, negocios de insumos informáticos, lencerías, relojerías, bazares, casas de ropa, inmobiliarias, agencias de autos y motos, en los horarios donde hay menores niveles de circulación. Podría entrar según el distrito un calendario específico para cada rubro, con los días permitidos para levantar la persiana por un rato.
«Estamos pidiendo que se habiliten algunas actividades no esenciales, sectores como la construcción. Acá un tercio de la población es pintor, albañil, plomero, gasista, electricista. Buscamos que nos liberen esas actividades. El que vive día a día no tiene ahorros para soportar y está en una situación compleja», sostuvo por ejemplo el intendente de Monte Hermoso, Alejandro Dichiara.
Como publicó este portal, el polo opuesto a este escenario es el Conurbano bonaerense. Los intendentes peronistas la Primera y Tercera sección, y sus pares de Juntos por el Cambio, coincidieron que en ese territorio no hay margen de maniobra. Lo mismo opina el Gobernador y el Presidente. Desde el lunes pasado la Provincia se ubica primera en la lista de los distritos con más infectados del país superando a la Ciudad de Buenos Aires. También lidera el número de muertos.
Unas horas antes de la reunión con los intendentes del interior, Kicillof había oído la opinión del comité de epidemiólogos y expertos que asesora a la Provincia. Los especialistas remarcaron que «en relación con la aplicación de la cuarentena administrada y focalizada se recomendó realizar un pormenorizado análisis de las actividades que se podrían retomar y bajo qué circunstancias». En otras palabras, los asesores pidieron extrema cautela.
Eso mismo les solicitó el primer mandatario a los alcaldes. “No quiero nada que eche por la borda todo lo que hicimos hasta acá”, fueron las palabras que Kicillof uso para marcarles la cancha. Y hubo otra demanda de parte del Gobernador: el compromiso de hacer especial énfasis en los grupos de riesgo, dentro de los cuales destacó a los adultos mayores.
Fuente-https://diputadosbsas.com.ar/
